El proceso acompañamiento en situaciones
de crisis y catástrofes
La intervención en
situaciones de crisis, catástrofes colectivas pueden incitar de una integración
de elementos terapéuticos y el trabajo comunitario. En estos contextos el apoyo
psicosocial deberá de ofrecer el acompañamiento desde sus primeras etapas, evitando
la estigmatización de la persona como víctima por enfermo. Entre las actitudes
básicas a cuidar por los equipos son:
Apoyo
y escucha
Una actitud escucha,
acogida y apoyo es fundamental en el momento de contactar con los afectados.
Puede ser necesario poner en marcha o reforzar servicios de intervención en
crisis y apoyo a los procesos de duelo en lugares apropiados vuelos que
favorezcan la accesibilidad de la próxima afectada. En algunos lugares donde
existe infraestructura pueden facilitar la ayuda además a través de vías
telefónicas específicas.
Ayudar
a enfrentar lo sucedido
se debe ayudar a las
personas a que comprendan su experiencia, ofrecer un acompañamiento que les
permita restaurar su sentido de control sobre el medio (nadie podía prever lo
que pasó, la mayoría de la gente hubiera hecho lo mismo).
Después de los primeros
días de conmoción y dependencia la gente puede empezar a plantear demandas y
problemas a los servicios o personal de apoyo. Hay que aprender a ver esos
procesos como parte de la recuperación de control sobre su vida y su propia
historia y no tratar de reprimir, ni asumir como respuesta displicente respecto
al personal que ayuda.
Comprender
las reacciones emocionales
Reasegurar a los
supervivientes que las reacciones emocionales tan fuertes que han vivido, o que
la sobrepasan, son habituales, y que son relaciones normales tras un suceso
catastrófico. Pueden utilizarse medios de comunicación y servicios educativos
como una forma de llegar a la mayor parte de la población.
Entre esas reacciones
normales, están: el miedo, una sensación de desesperanza, la tristeza, la
nostalgia por los que se han ido, sentimiento de culpa, la vergüenza, el enojo,
el preguntarse por el que ha sobrevivido, recuerdos y reminiscencias
sistemáticas de las personas que ha perdido. Dicho sentimiento son aún más
fuertes y mucha gente ha muerto, si las muertes fueron súbitas o violentas, si
los cuerpos no han sido recuperados, se existía una relación muy estrecha con
la persona que falleció, o si la relación con la persona que murió estaba en un
estadio difícil. Se necesita tiempo, acompañamiento y solidaridad para ir
enfrentando es impacto.
Normalizar
las reacciones físicas
entre las respuestas
físicas más frecuentes están: cansancio, falta de sueño, pesadilla, pérdida de
memoria y concentración, palpitaciones, temblores, dificultades para respirar,
diarrea, tensión que puede producir torres de cabeza o espalda, trastornos menstruales
y cambios en el interés sexual. Todas estas son regiones física bastante
comunes producidas por el estrés. Es importante entenderla como expresión de
sufrimiento pero también poner atención a las personas que se encuentran más
afectadas y ayudando a disminuir los síntomas pero sin me vitalizar el
sufrimiento. Cuando la persona se encuentra muy aturdida por el shock emocional
abordar los síntomas físicos puede ser útil como una forma de hacer algo,
establecer una buena relación y mejorar el bienestar.
Acciones
a desarrollar
Las siguientes acciones
también pueden permitir que los hechos y los sentimientos se puedan enfrentar
mejor:
Favorecer las actividades
para mantenerse activo y ayudar a los otros, ya que permite mejorar el estado
de ánimo. Sin embargo, la hiperactividad es negativa e impide que la persona se
ayude a sí misma.
Confrontar la realidad,
asistiendo los funerales o inspeccionando las pérdidas, cuando la persona se
sienta preparada, puede ayudar a la gente a enfrentar lo ocurrido. Respetar el
ritmo de la persona o a quienes no tienen volver a conocer directamente la
situación.
Recibir ayuda de otra
gente es positivo, así como poder expresarse sobre lo ocurrido. Aunque los
consejos de tratar de olvidar y seguir adelante puedan estar cargados de buenas
intenciones, muchas veces resultan negativos ya que suponen una tarea imposible
y trasmiten una falta de comprensión del otro.
Algún grado de privacidad
para enfrentar los sentimientos es importante, teniendo en cuenta en todo
momento las diferencias culturales.
Facilitar
la afirmación comunitaria y reforzar mecanismos protectores
Dichos espacios pueden ser
ritos, celebraciones, formas de organización y apoyo en el contexto cultural.
Tomar en cuenta la experiencia previa de las poblaciones, para apoyar el
restablecimiento de una cierta normalidad, la expresión de su identidad y las
formas de apoyo comunitario.
Específicamente apoyar las
actividades que restituyan un sentimiento de normalidad y rutinas positivas,
como la escolarización o actividades comunitarias. Los programas de apoyo y
reunificación familiar favorecen el apoyo social y disminuyen el estrés de la
separación familiar.
Desarrollar
la autonomía y control del medio
Uno de los riesgos más
importantes es la creación de una mentalidad de dependencia, producida por las
pérdidas y un planteamiento asistencial de las acciones. Para ello:
Contribuir a desarrollar
la capacidad de decidir sobre su vida mediante la participación en reuniones,
Consejo comunitario, etc.
cuidar los efectos
perniciosos que algunas formas de ayuda pueden tener al propiciar una actitud
de dependencia (por ejemplo si se introduce el dinero en actividades cotidianas
de las que anteriormente no formaba parte y que tienen que ver con autonomía
zonal o autogestión familiar).
Intervención
temprana y búsqueda de víctimas
ofertar apoyo a todas las
víctimas ayuda a que la gente entienda mejor sus acciones, si trasmite el
siguiente mensaje: "los sentimientos que se tiene son comprensibles y las
reacciones son frecuentes dada la situación vivida".
Puede haber personas que
pierden el control. Se trata de reacciones lógicas y comprensibles que no deben
hacer perder la calma a las personas que acuden en ayuda, ni mucho menos entrar
a su vez en respuestas agresivas o descalificadoras.
Una intervención activa,
permite que la población de riesgo entre en contacto con las personas que le
pueden ayudar.
Valorar
globalmente los factores que pueden interferir
Una interrogante que pueda
ayudar a analizar la situación tras la catástrofe es ¿qué elementos contextual en interfieren en
el afrontamiento?
Los procesos judiciales,
el impacto la corrupción, los conflictos
previos o agravados por los hechos, etc.; son factores que deben tenerse en
cuenta en la preparación, el desarrollo y acompañamiento posterior. Hay que
tener una visión global
de las interacciones entre
diferentes factores . Por
ejemplo en los procesos del duelo
pueden interferir declaraciones de los responsables públicos, planes de reconstrucción
en las zonas donde no se recuperaron los cuerpos o las diferentes formas de
reparación económica. A pesar de que no se tenga control de los factores, pero
los problemas y respuesta de la gente en su contexto social de ayudar a
entender lo mejor, evitar malos entendidos y adaptar las intervenciones.
Evaluar
la percepción de riesgo: individual y colectiva
si la gente tiene que
convivir con el peligro, o existe riesgo de repetición de los hechos, es
importante evaluar la percepción asociada al riesgo y su influencia en la
conducta colectivo (por ejemplo, manejo de la alerta, respuestas frente a experiencias
que recuerdan la catástrofe, etcétera.). Es probable que la gente haya
desarrollado
algunas estrategias comunitarias con sus recursos positivos pero también
con posibles aspectos problemáticos
.
Algunas preguntas que
pueden ayudar a evaluar esto son: ¿la
gente se siente excesivamente vulnerable o por el contrario tiene un sesgo de
vulnerabilidad? ¿Existen percepciones
o creencias que inducen a conductas de riesgo como negación del peligro o un
estereotipo negativo respecto a otros grupos? ¿Se daba la imposición de consenso y
exclusión de información que advertía el peligro?
Si el grupo tiene que
prepararse para futuras eventualidades, es especialmente cuando está
comprometido en la toma de decisiones sobre medidas a tomar, puede ser
importante hacer planes realistas y una discusión de los tópicos o mitos más
frecuentes.
La
aproximación más o menos fatalista de los hechos
Analizando el
afrontamiento relación con la cultura nos preguntamos: ¿se dan especies
verbales de fatalismo? Y ¿y dichas expresiones implican pasividad?
En muchas culturas
tradicionales son frecuentes las expresiones verbales "fatalistas"
(destino, voluntad de Dios, etc.) Pero eso no significa que siempre se asocian
a pasividad. Las culturas con una cierta aproximación "fatalista presentan
una capacidad de resistencia y de enfrentamiento importante ante los desastres
naturales, cuando ayudar a la gente centrarse en las actividades de
reconstrucción más instrumentales y evitar una búsqueda repetitiva e
infructuosa de sentido. Por consiguiente ser necesario no confundir aceptación
cultural con pasividad y la activa, reforzar actividad instrumental y no
confrontar creencias "fatalistas". Sin embargo también puede estar
inducido socialmente por un contexto represivo o ser funcional a un contexto de
dominación, con lo que se impactó sería negativo.
Crecimiento
o revaluación positiva
¿serán formas de
revaluación positiva sobre lo ocurrido, creencias que el trauma ha reforzado o
ha hecho crecer a las personas de la comunidad? Aunque estas respuestas sean
minoritarias en muchas ocasiones, en otras pueden dar lugar a una movilización
colectiva hacia la prevención, la reparación un apoyo mutuo. Una estrategia de
apoyo puede ser reforzar estas formas de red interpretación positiva del trauma
y de crecimiento personal y colectivo. Si no sembrado, enfatizar el recuerdo de
la solidaridad comunal, las respuestas altruistas y las formas positivas que
enfrentar lo ocurrido.
Formas
de respuesta más instrumentales o emocionales
¿se enfrente el trauma o
catástrofe controlando el medio (control primario) o mediante la actuación al
medio (control secundario)?
En caso de que la
tendencia cultural sea una escasa expresión o afrontamiento emocional reforzar
el afrontamiento instrumental sin cuestionar las emociones personales. En
diferentes culturas las experiencias difíciles o de catástrofe se afrontan de
forma distinta: controlando el medio, enfrentando la causa (control primario) o
mediante la actuación del medio (control secundario). El segundo tipo de
afrontamiento pues el adaptativo a un contexto hostil o precario. En ese caso
reforzar las conductas de prevención y curativas posibles y realistas. Tener
presente que el afrontamiento secundario y emocional es positivo ante una
pérdida definitiva.
Tendencia
de descarga o inhibición emocional
¿Se da una fuerte descarga
y expresión extrema de emociones negativas en el marco de la cultura local? Si
las emociones son extremas y dejan a la gente muy afectada puede apoyarse en su
regulación, acompañando las de forma de afrontamiento cognitivo de comprensión
y aceptación.
En otros casos pueden
darse respuesta de inhibición emocional extrema. Si la inhibición es extrema y
se acompaña de ambivalencia (querer expresar y no poder), buscar porque ocurre.
Puede ser por:
a)¿no querer molestar al
entorno?
b) ¿creer que nos
entenderá?
c)¿el estigma del suceso?
Por ejemplo violación
d)¿el entorno que rechazan
expresión corresponde de forma insatisfactoria?
Tener en cuenta que ante
todo debe respetarse los tabúes y estigmas (aunque no reforzarlos y evitar que
induzcan a la marginación de algunas personas), entender la
"quemazón" de las redes de apoyo social, y ayudar a las víctimas a
expresarse en grupos que asegura respuestas positivas y entiendan la experiencia.
Pero hay que recordar que
la ley presión fuerte de emociones negativas no es necesariamente el
adaptativo. La postergación emociones negativas (no da rienda suelta al enojo y
contar por ejemplo hasta 10), la distracción y focalizarse me pide positivas
(cuidar de un recién nacido por ejemplo) son positivas.
Respuesta
de focalización en el problema
¿será regulación o
pensamientos repetitivos?, ¿Esta regulación ayude entender lo ocurrido en un
marco de sentido (religioso o ideológico) o por el contrario sólo sirve para
grabar y mantener la ficción? En este último caso, puede ser de ayuda media
distracción en actividades positivas y apoyo que interrumpa los pensamientos
repetitivos. Reforzar las actividades de búsqueda de sentido religioso si las
personas son creyentes o ideológicas que ayuden a encontrar un sentido y
mantener una postura activa flexible.
Presencia
de rituales y características del proceso de duelo
En general, ¿será la
aceptación de la pérdida y el mantenimiento de la relación con los difuntos? Y
¿se logra realizar los rituales de duelo?
De alguna manera todas las
culturas y todas las personas afrontan tareas del duelo tales como aceptación,
expresión, adaptación, recuerdo y reconstrucción de los lazos. Pero la
importancia característica de estas pueden ser muy diferentes. Hay que conocer
cuáles son las pautas culturales locales: re la depresión, forma de apoyo a
familiares, ceremonia de recuerdo, ritos, etcétera., Favorecer las actividades
que ayuden a apoyar el proceso de duelo tales como rituales y prácticas que
impliquen honrar la memoria y el diálogo simbólico con muertos o los
desaparecidos. Respetar la tradición cultural sobre ancestros y presencia de difuntos.
Tener en cuenta que el
contexto puede dificultar o bloquear el proceso de duelo (imposibilidad de
hacer los rituales, expresar lo sucedido o compartir su experiencia con otro, o
precariedad que llegue rápidamente a tener que adaptarse a la nueva situación
postergando otras necesidades).
El acompañamiento a
procesos de duelo necesita una continuidad y la construcción de una relación de
confianza. No inducir abrir procesos en los que posteriormente no se va a estar
para acompañar. Tampoco forzar la confrontación con emociones o hechos que
puedan golpear a los sobrevivientes. Hay que adaptar el apoyo a las necesidades
y proceso de los familiares y comunidad.
No hay que tener una
visión tan corto -placista del impacto emocional (emergencia), ni estar concentrado
sólo en la experiencia traumática, sino tener una visión más a medio plazo
sobre la dificultad es que la gente puede tener.
En las situaciones de
catástrofe colectiva el rescate de la memoria de las víctimas puede ayudar a
que ese recuerdo no sea solamente individual sino que tenga también un carácter
social.
Estrategia
de intervención psicosocial
Propiciar
espacios grupales de intercambio y apoyo
No debemos cuestionar las
cintas preguntas ¿existe el grupo de intervención? Y¿es necesario crear grupos
de autoayuda?
Favorecer la creación de
grupos que puedan proporcionar ayuda mutua a través de: la objetivación y el
análisis de la realidad; el sostén mutuo; el reconocimiento y sentimientos y
vivencias escondidas; la generalización de las experiencias; la búsqueda e
integración de soluciones; el desarrollo de acciones comunes para enfrentar los
problemas; el desarrollo de actividades sociales gratificante.
Muchos grupos pueden no estar focalizados en
el trauma, sin obedecer a necesidades sociales de intercambio y tener
encuentros positivos. Hay que valorar si los grupos y existentes pueden cumplir
funciones de apoyo mutuo. Los grupos centrados en una experiencia determinada
pueden ser más útiles cuando:
1.
experiencia
sido vivida de forma colectiva
2. las personas no encuentran otro espacio
social para compartir sus problemas y buscar soluciones
3.
la
gente se puede beneficiar de intercambio entre iguales. Hay que tener siempre
en cuenta la importancia y superar el riesgo de estigma o ser considerado como
"especiales".
Las intervenciones
focalizadas en las personas parecen ser más útiles al inicio del duelo, en
cambio las intervenciones que se centran sobre la reinserción de las personas
afectadas por la catástrofe son adecuadas más adelante.
Trabajo
de redes
Un primer paso es evaluar
la oportunidad del trabajo y la demanda formulada. Es necesario ver los
beneficios pero también el impacto que va a tener nuestra acción y su
continuidad.
Evitar en lo posible el
manejo de estereotipos frecuentes sobre la salud mental (asociado por ejemplo a
patología, "estar loco", o discapacitado, etcétera.).
Dedicar tiempo suficiente
para tener un análisis de la situación que nos permita definir criterios para
el trabajo a realizar.
Identificar líderes o personas
claves que puedan proporcionar información de activar redes de apoyo. Buscar
diferentes puntos de vista otra angular las fuentes, dado que pueden tener un
punto de vista parcial de la situación o sus propios intereses políticos.
Tratar de escuchar a los diferentes sectores implicados y no sólo a los
representantes formales.
Identificar los agentes
multiplicadores, realizar actividades de formación, coordinación y
fortalecimiento de redes. Muchas veces esta red y existen pero necesitan
escucha, acompañamiento, formación y material de trabajo. Además, tener en
cuenta que las redes corren el riesgo de sobrecargarse.
Mantener el seguimiento y
evaluación periódica del proceso intervención utilizando indicadores
psicosociales como: evolución de procesos de duelo; miedo y conductas
colectivas; búsqueda de sentido e interpretación de los hechos; conflicto;
procesos organizativos; impacto de la ayuda humanitaria y respuestas
institucionales, etc.
Hay que ser un uso
flexible los programas, tener claridad de cuáles son las líneas trabajo que
pueden favorecer el apoyo a la gente, pero se flexible con respecto a ritmos y
prioridades.
Relación
con sistemas locales
La reconstrucción de los
servicios de salud existentes debería ser una prioridad después de las catástrofes
colectivas como forma de reforzar los propios recursos y la participación. Esto
da apoyo a los profesionales locales y proporciona con Trinidad. La conclusión
estructuras paralelas corre el riesgo de disminuir los esfuerzos públicos para
proporcionar servicio, así como sorber profesionales que trabajen en dichos
servicios, debilitando los esfuerzos de reconstrucción. Pero también pueden
existir problemas de seguridad o falta de confianza en las instituciones que
recomiendan asegurar el trabajo de apoyo mediante redes alternativas.
Identificar la presencia e
importancia para la población de terapeutas tradicionales que pueden entender
mejor los condicionantes culturales y disponen de recursos terapéuticos
propios, y en muchos casos cuentan con amplia experiencia y eficacia probada en
sus actuaciones. Sin embargo son aplicables los criterios de cualquier otro
proceso terapéutico, como la capacidad ayuda, la confianza, el respeto o la
compre social del sufrimiento.
Identificar
acciones grupales y de apoyo mutuo
Identificar precozmente la
respuesta grupales ante el estrés como son: la rigidez, mantener
permanentemente ocupados realizando tareas repetitivas o refugiarse en el
trabajo, dedicación de problemas importantes pero que generan tensión o el hablar
corrientemente los hechos sin hacer nada.
Respetar el espacio de
descanso. Dar vueltas constantes de los problemas sin discutirlas de forma
estructurada para buscar soluciones es una forma de "ruido".
Proporcionar espacio para
poder compartir experiencias y apoyarse mutuamente, motivar positivamente pero
no forzar al equipo. Evitar si colonizar a los que iban integrando estos
aspectos en la dinámica habitual de trabajo.
Enfrentar
los dilemas éticos
Discutir de forma abierta
los dilemas éticos en caso de ser factores de estrés. Buscar elementos de
consenso y criterios comunes, y revisar periódicamente la adecuación de las
decisiones.
Ayudar a los miembros del
equipo a aceptar los propios límites, y evitar presionar moralmente a otros. El
aumento de la presión sobre el equipo puede ser un recurso útil en un momento
de crisis, después se convierte en un factor de agotamiento.
Algunas
actividades para apoyar a niños y niñas
Organizar actividades en
la que los niños y niñas tengan oportunidad de comentar lo ocurrido, narrar
cómo fueron afectados y cómo se sienten ante la situación vivida. Complementar
esto con información sobre las causas del desastre y establecer con ellos
medidas de seguridad (por ejemplo en un terremoto no pasar por determinados lugares
peligrosos, que hacer si tiembla la tierra, etc.). Buscar un lugar apropiado
para ello, sin adultos que puedan la comunicación y sin obligar a nadie a
hablar.
En algunas experiencias ha
sido importante juntar a niños que han sido más o menos afectados (evitar por
ejemplo que se junten todos los que han tenido pérdidas familiares aislados del
resto) para que se apoyen entre sí, jueguen juntos, y puedan establecer un
clima de distensión. Utilizar juegos habituales de contacto y que generen un clima
de confianza.
Si hay dificultades de
participación, hacer preguntas dirigidas al grupo como por ejemplo ¿dónde
estaban cuando ocurrió?, ¿Que vivieron? Si no funciona se puede comenzar
contando dónde estabas, como te has enterado, que dice.
No juzgar las expresiones
de tristeza, enojo y miedo. Recójala como algo normal producido por el desastre
y ayúdeles a animarse y a platicar si tienen ganas de seguir conversando.
Elaborar un cuento sobre
lo sucedido. Se puede registrar la narración en una grabación o por escrito. Lo
más mayores pueden escribir los relatos y leerlos ante el grupo. Puede ser un
cuento centrado en ellos o en la comunidad. Sería bueno que no se centre sólo
en los hechos, sino a socios sentido de reconstrucción. Por ejemplo en tres momentos:
como era su comunidad, lo que pasó y lo que ellos quieren para el futuro.
Evitar así que se queden focalizados sólo en la imagen del año actual. Lo mismo
puede hacerse mediante dibujos. Hacer algo colectivo posteriormente con eso:
ponerlo en la escuela o el albergue, en lugares donde la gente recibe
información (paneles por ejemplo de recortes de periódicos o información sobre
la reconstrucción, etcétera.).
Se pueden hacer
dramatizaciones. Pero evitar que esas dramatizaciones se centren en la imagen del
horror (por ejemplo en el momento de los hechos, o situaciones muy dolorosa).
El mejor dramatizar situaciones sobre cómo manejarla dificultades o el manejo
de la prevención. Por ejemplo, una situación entre los niños o su familia sobre
lo que pasó y sobre lo que dicen los padres, o explorar sus ideas sobre
prevención en una conversación entre varios niños, etc.) Esos ejercicios pueden
hacerse con niños más mayorcitos y necesitan luego de una corta evaluación y
"S" por parte del animador, explicando algunas cosas que se pueden
hacer. También se puede dramatizar que hacer por ejemplo en una situación de
emergencia (donde protegerse, renacer, etcétera.).
Nueva información que
pueda ser contradictoria obsesivamente tranquilizadora, como por ejemplo: no
pasa nada… si los niños ven una discrepancia entre lo que se dice y su propia
experiencia o lo que se escucha de otros adultos la cosa no va funcionar y se
van a sentir más aislados y ansiosos. Este es un premio importante
especialmente cuando la tierra sigue temblando, y puede haber una
identificación directa entre nuevo temblor y lo que sucedió (lo que hacemos
también los adultos seguramente, pero tenemos más recursos para evaluar la
situación).
Organizar juegos que
estimulen el reconocimiento su compañeros (por ejemplo, juegos cooperativos)
Manejar las explicaciones
sobre los hechos. Es posible que los niños y niñas tengan sus propias
percepciones relacionadas con lo que los adultos hayan dicho. Hay que intentar
dar un ideas congruentes entre todos los adultos significativos. Puede ser
necesario hablar con la familia sobre estas explicaciones y comunicación con
los niños. En todo caso es importante:
1.
no
dar explicaciones que lleven a un fatalismo paralizante como castigo divino,
etc.
2. explicar a su nivel ocurrido, que porque
la tierra tembló y sigue temblando en menor medida, explore sus creencias sobre
eso.
3. Explicar que algunas personas murieron
por esa causa, que ellos no fueron culpables de lo que pasó.
4. Evitar explicaciones sobre la muerte que
puedan generar más confusión, como que la persona fallecida está de viaje o
dormida, eso puede aumentar la confusión o el temor de los niños;
5.
no
tratar de contestar preguntas que no se sabe, hay que ser honesto y no tener
miedo a decirlo.
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Las crisis psicológicas: ¿Qué hacer? |